El líder de la organización islamista Hermanos Musulmanes, Mohamed Badie, ha reiterado este viernes su respaldo al hasta el miércoles presidente del país, Mohamed Mursi, y ha negado haber intentado huir del país y haber sido detenido.
"Me enorgullezco de mi presidente Mursi, quien es vuestro presidente y el presidente de todos los egipcios", ha dicho durante una manifestación en favor del exmandatario frente a la mezquita cairota de Rabaa al Adawiya.
"Esta manifestación refleja a todo Egipto, con sus diferentes facciones", ha manifestado, antes de subrayar que el grupo islamista "no abandonará las calles hasta que Mursi sea reinstaurado en el cargo", según ha recogido el diario egipcio 'Al Ahram'.
"Conseguiremos recuperar los derechos del pueblo egipcio, que han sido obviados con esta desgraciada conspiración", ha espetado, momento en el que los manifestantes han coreado cánticos contra el jefe del Ejército, Abdelfatá al Sisi.
Al Sisi anunció el miércoles la suspensión de la Constitución y puso al presidente del Tribunal Constitucional al frente de la Presidencia. En consecuencia, el jueves el presidente del organismo, Adli Mansur, juró su cargo como presidente interino hasta la celebración de elecciones presidenciales y parlamentarias.
Badie ha insistido en que el pueblo egipcio "devolverá al poder a Mursi sobre sus hombros y sacrificará sus almas por él". "Dios es más grande que todos los que derraman la sangre de los mártires revolucionarios. Dios es nuestro testigo", ha añadido.
Por otra parte, ha aclarado que no escapó de la orden de detención emitida en su contra. "Estas acusaciones son simples mentiras. No somos cobardes, somos revolucionarios", ha remachado.
Este mismo viernes, Hermanos Musulmanes ha desmentido el arresto de Badie, rechazando así las informaciones publicadas en este sentido durante la jornada del jueves.
El jueves, fuentes de seguridad egipcias aseguraron que Badie había sido detenido por las fuerzas de seguridad egipcias en la ciudad de Marsa Matrouh (noroeste). En base a dichas informaciones, la Policía siguió a Badie a la ciudad, que está cerca de la frontera con Libia pero no cree que estuviera intentando huir del país, según las fuentes.
Por último, ha cargado contra el jeque de la Universidad de Al Azhar, Ahmed al Tayyeb, y el papa copto, Tawadros II, que solicitaron la celebración de elecciones presidenciales anticipadas y que se dirigieron a la nación tras el discurso de Al Sisi para respaldar la decisión del Ejército.
"Le digo al jeque de la mezquita Al Azhar --la institución suní más importante del mundo--: Eres un símbolo, pero ya no puedes seguir hablando en nombre de los musulmanes", ha manifestado Badie. "Papa Tawadros, usted es también un símbolo pero no puede seguir hablando en
Al menos tres muertos por disparos del Ejército contra partidarios de Mursi
Al menos tres manifestantes han sido abatidos frente al cuartel de la Guardia Republicana en El Cairo en el que se encuentra retenido el presidente derrocado Mohamed Mursi, según fuentes de seguridad.
Estas fuentes han señalado que las fuerzas de seguridad han abierto fuego contra los manifestantes, pero un portavoz del Ejército ha asegurado que los soldados solo dispararon balas de fogueo y gases lacrimógenos. Un periodista de Reuters ha visto a manifestantes alcanzados por perdigones.
Cientos de partidarios de los Hermanos Musulmanes, organización de la que procede Mursi, habían marchado hacia este cuartel situado en los alrededores de la capital y se congregaron frente a él. El reportero de Reuters ha escuchado disparos y ha visto a al menos ocho personas heridas entre los manifestantes.
Según ha relatado, cientos de manifestantes se acercaron al cordón policial. Algunos hombres se acercaron a una alambrada y colocaron una foto de Mursi en ella, pero un soldado la quitó a continuación y la rompió. La multitud ha insultado a los soldados y algunos les han mostrado su zapato, un gesto tradicional de insulto.
El periodista ha visto a los soldados disparar al aire y luego ha escuchado disparos. A continuación ha podido ver a al menos ocho manifestantes heridos, tras lo cual se han lanzado gases lacrimógenos para dispersar a la multitud.
El corresponsal de la BBC también ha indicado que los soldados han realizado disparos al aire después de que unas 2.000 personas se hubieran congregado en el lugar, y a continuación ha abierto fuego contra los manifestantes.
Una hora después, cientos de manifestantes seguían en las inmediaciones, algunos rezando. Algunos portan imágenes de Mursi. Por su parte, los soldados siguen en sus posiciones detrás del alambre de espino y helicópteros militares sobrevuelan regularmente la zona.
Los Hermanos Musulmanes han instado a través de su página web a que más de sus seguidores se concentren en este lugar.
Los enfrentamientos entre partidarios y detractores de Mursi han dejado 52 muertos
Los enfrentamientos entre partidarios y detractores del derrocado presidente egipcio Mohamed Mursi han dejado ya 52 muertos y 2.619 heridos desde el pasado fin de semana cuando comenzaron las protestas, según el último balance ofrecido este viernes por el Ministerio de Sanidad.
Según el Ministerio, en los incidentes que hubo antes de las protestas convocadas para el 30 de junio --primer aniversario de la elección de Mursi-- murieron tres personas en Daqahliya; dos en Alejandría; uno en Sharqiya, y otro en Port Said. Además, también hubo 703 muertos en todo el país.
El domingo, cuando se produjeron las multitudinarias manifestaciones para reclamar la renuncia de Mursi, murieron 16 personas en El Cairo y otras provincias, ocho de ellas en los enfrentamientos que hubo en la sede de los Hermanos Musulmanes en la capital. También hubo 781 heridos, según los datos del Ministerio, recogidos por el diario 'Al Masry al Youm'.
El martes por la noche, 18 personas murieron y otras 619 resultaron heridas en los sucesos ocurridos en un barrio de la localidad de Giza, próxima a El Cairo, siendo este el incidente más mortífero desde que comenzaron las protestas. Partidarios de Mursi se enfrentaron con las fuerzas de seguridad en la Universidad de El Cairo.
Después de que el Ejército derrocara a Mursi este miércoles, once personas murieron y otras 516 resultaron heridas, de las que 362 siguen recibiendo tratamiento médico, según el Ministerio de Sanidad.