El Gobierno británico se plantea el cierre a partir del próximo lunes de bares y restaurantes en el norte de Inglaterra, una medida aplicada ya en partes de Escocia, para contener el coronavirus, informa este jueves la BBC.
La cadena pública dice que el Ejecutivo podría introducir también un sistema de alerta local de tres niveles que indicaría el grado de riesgo en las diferentes áreas geográficas, lo que llevaría a imponer distintas restricciones.
Las zonas del norte de Inglaterra con más repunte de contagios incluyen las ciudades de Manchester, Liverpool y Newcastle, entre otras, donde ya es ilegal mezclarse con miembros de otro hogar en lugares cerrados y los "pubs" cierran a las 22.00.
La ministra principal del Gobierno escocés, Nicola Sturgeon, anunció ayer que a partir del viernes, en cinco áreas del centro de Escocia, incluidas las ciudades de Glasgow y Edimburgo, cerrarán los establecimientos hosteleros, menos cafeterías que no vendan alcohol, durante dos semanas.
Las restricciones se aplicarán hasta el 25 de octubre en los bares, "pubs" y restaurantes de las zonas de Greater Glasgow & Clyde, Lanarkshire, Ayrshire & Arran, Lothian y Forth Valley, donde solo podrán servir comida para llevar.
En el resto de Escocia, durante este periodo los establecimientos hosteleros tendrán que cerrar el servicio en su interior a las 18.00 y no podrán ofrecer alcohol, aunque sí podrán hacerlo en las terrazas, hasta las 22.00 de la noche.
En el "cinturón central", con más contagios, se cerrarán a partir del 10 de octubre las boleras y las salas de bingo y de billar, se suspenden los deportes de contacto para los mayores de 18 años (salvo profesionales) y los actos al aire libre, aunque los gimnasios permanecerán abiertos.
En todo el Reino Unido, los contagios se incrementaron este miércoles en 14.162, hasta un total de 544.275 positivos, con 70 nuevas muertes contabilizadas, hasta 42.515.
Sin embargo, según otras estadísticas oficiales, el número real de decesos atribuibles al virus superaría los 57.800.
En declaraciones a Radio 4 de la BBC, la presidenta de la Academia de Reales Colegios Médicos, Helen Stokes-Lampard, alertó hoy de que aumentan de manera "preocupante" las cifras de pacientes en las unidades de cuidados intensivos (UCI).
"Actualmente, tenemos a más de 3.100 personas en hospitales con coronavirus en el Reino Unido, de las cuales al menos 500 están en la UCI", frente a unas 60 hace un mes, reveló.
La comisión de Sanidad y Atención Social de la Cámara de los Comunes y la de Ciencia y Tecnología han anunciado que investigarán la gestión del Gobierno de la pandemia, entre críticas de continuos cambios de opinión y medidas aparentemente ineficaces o contradictorias.
El Ejecutivo de Boris Johnson está bajo presión de sus diputados conservadores, que exigen que el Parlamento apruebe todas las nuevas medidas, y de los mandatarios locales y regionales, que acusan al primer ministro de no consultar con ellos.