Este informe, que cada año realiza la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), indica que la industria cinematográfica que durante los años noventa y principios del siglo XXI presentó una evolución positiva, vive desde mediados de esta primera década de siglo una tendencia descendente.
Desde entonces, el número de pantallas sigue disminuyendo lentamente y el año pasado descendió a 4.073 frente a las 4.097 de 2009, mientras que el número de espectadores pasó de los 110 millones de 2009 a los 101 de 2010, lo que supuso un detrimento del 8,7 por ciento y una recaudación total de 661,1 millones de euros, el 2,5 % menos que el año anterior.
Según el Anuario SGAE, la nacionalidad de las películas elegidas por el espectador sigue siendo predominantemente estadounidense (70,8 %), mientras que las de procedencia española sólo llegan al 11,9 por ciento.
La mayoría de espectadores se concentra principalmente en Madrid (20,7 %) y Cataluña (20 %), y la asistencia por habitante al año es de 2,15 películas.
En el panorama musical las cifras no son mucho más alentadoras y, aunque en los primeros años de este siglo la música en vivo experimentó un auge considerable, este se vio también truncado en 2009 con una tendencia a la baja que prosiguió en 2010, con un descenso del 2,6 por ciento en el número de conciertos y el 5,2 % menos en el de espectadores.
Sin embargo, la recaudación sí que subió el 5 %, alcanzando los 182 millones de euros, nueve millones más que el año anterior, gracias "sobre todo" a la celebración de Rock in Rio Madrid.
El sector de la música grabada sigue sufriendo una situación delicada a nivel mundial, lo que en España se traduce en un descenso de las cifras mucho mayor que el que experimenta el conjunto del mercado internacional.
Así, en 2010 el sector facturó 179 millones de euros, el 21,1 % menos que el año anterior, aunque en consonancia con las cifras mundiales, la facturación del mercado digital asciende imparable con unos ingresos de 41,6 millones de euros, lo que supone el 23,2 % del negocio.
Al contrario que con el cine, la producción musical nacional es la que encabeza la lista de álbumes más vendidos, con Sergio Dalma, Joan Manuel Serrat, Alejandro Sanz, Dani Martín y Miguel Bosé por delante de Justin Bieber, que es el único artista no español que entra en el top 10.
Las artes escénicas, aunque no se enfrentan al problema de la piratería, también han descendido en número de espectadores (7,9 % menos que en 2009) y el número de funciones representadas ha bajado el 5,5 por ciento.
Dentro de las artes escénicas, el teatro, que comprende el 90 por ciento de las representaciones, registra un descenso del 7,5 % en el cómputo de espectadores, lo que supone 1,17 millones menos que el año anterior, aunque la recaudación baja solo 6 millones de euros respecto a 2009.
La danza, por su parte, registró en 2010 uno de los peores años de recaudación con algo menos de 15 millones de euros, lo que supone un descenso del 18 %.
Finalmente, en el campo de la televisión, que sigue en constante evolución, destaca la implantación en 2009 de la TDT y el apagón analógico, la desaparición de la publicidad en TVE, que ha generado un incremento del precio de la misma y una mayor facturación de las cadenas privadas, y la fusión de algunas cadenas, lo que ha provocado la fragmentación de la audiencia y el descontento de los anunciantes.
En cambio, el consumo diario de televisión muestra una tendencia de aumento en la demanda y la cifra de 2010 es la más alta de los últimos dieciocho años, con una media de 234 minutos diarios de consumo por persona.