En el cuarto día de huelga indefinida del Personal Técnico de Integración Social externalizado en los centros educativos de Primaria y Secundaria en Andalucía, el colectivo en Rota junto a representantes de las AMPAS y familiares de los niños y niñas con necesidades educativas especiales, se han reunido en un encuentro con la prensa para expresar su malestar y el por qué de sus movilizaciones.
En línea con las reivindicaciones y quejas de las PTIS en Cádiz, donde la huelga está teniendo un seguimiento del 90% de las 380 profesionales en la provincia, también las cinco profesionales que trabajan en Rota y otras dos que ofrecen sus servicios en Jerez, han decidido parar temporalmente ante la situación de precariedad que lleva viviendo el sector desde hace veinte años y especialmente a raíz de esta última contratación del servicio a la empresa gallega Osventos S.L.
Durante esta atención a los medios, además de las PTIS en Rota, también han estado presentes representantes de AMPAS y familiares de alumnado con necesidades educativas especiales en luna de las aulas de la OTED. Las profesionales en Rota atienden a una treintena de niños con necesidades educativas especiales en Rota cuyas familias han mostrado su apoyo a este colectivo. Mercedes Peña, madre de uno de los niños en esta situación, explicaba que los niños estaban viéndose afectados también y reclaman que se atienda las reivindicaciones de este colectivo. “El derecho a la educación de estos niños está en manos de una empresa que juega con los derechos de los niños”, apuntaba Charo Martín-Arroyo, representante de la FLAMPA: “Estamos hablando de niños y niñas que están desatendidos en estos momentos porque un centro educativo no tiene personal suficiente para suplir la falta de esa PTIS. No saben lo complicado que es tener a un niño que no se integra en un aula binaria porque no tiene personal de apoyo y que no puede realizar sus funciones dentro del cole y eso es algo que la Junta de Andalucía está mirando para otro lado”.
Las PTIS externalizadas son la mayoría en Rota puesto que tan solo hay dos profesionales públicas. Desde hace cuatro días, los centros públicos de Azorín, Luis Ponce de León, Astaroth y Castillo de Luna no cuentan con el servicio de las PTIS debido a esta huelga y la situación, dice Ángela Roda, miembro del comité de trabajadores de PTIS, porque los niños y jóvenes con necesidades no están recibiendo la atención necesaria y la atención a este alumnado está siendo "bastante caótica" en los centros: “Hay niños que no pueden estar solos sin el apoyo de una PTIS”.
Esta es una situación que sufre el colectivo de PTIS en toda Andalucía. Los días 27 de octubre y 7 de noviembre el colectivo ejerció su derecho a huelga y la empresa no estableció los servicios mínimos. Se elevó un escrito a la Agencia Pública de Educación y la respuesta de la Junta, apunta Ángela Roda, es que se trata de un conflicto laboral entre la empresa y los trabajadores, algo que el colectivo niega, puesto que, al ser la administración autonómica la entidad que contrata el servicio externalizándolo, tiene responsabilidad sobre el mismo, explicaba Ángela Roda. El colectivo reclama a la empresa Osventos, actual adjudicataria del servicio, cumpla el convenio colectivo y a la Agencia de Educación Pública de Andalucía que haga un seguimiento de esta empresa para que cumpla con el convenio. La situación en los centros requiere de las PTIS porque insisten son personal esencial e insisten no pararán con sus reivindicaciones hasta que la Junta no tome parte real en el asunto.
La PTIS no solo realizan una labor asistencial con los niños con necesidades educativas especiales, sino también refuerzo educativo, están dentro del equipo de orientación educativa, y mantienen contacto con la familia del alumnado durante el horario lectivo.