Comenzaron a colocarse en las terrazas de los bares con la prohibición del tabaco dentro de los establecimientos y con el tiempo se han convertido en un elemento indispensable en las terrazas al llegar el invierno.

Son las estufas de gas que se encuentran entre las mesas y que incluso resultan estéticas por su luz. El problema son las horas que están encendidas y sobre todo su proliferación ante el punto de que están en la mayoría de las terrazas. Si se comienza a multiplicar la cantidad de CO2 que lanzan a la atmósfera, se comprobará que en estos tiempos en los que está cuajando en la sociedad el gran problema del cambio climático suponen un elemento añadido al calentamiento de la capa de ozono.

La bióloga Adriana Hurtado lo manifestaba en el programa de Radio La Isla La aventura de la vida, en el que proponía sustituir las estufas actuales de los bares por otras de energía renovable que no emitan CO2 en la atmósfera.