El coche de un taxista que realiza servicios previamente concertados por clientes con relación a enclaves como el aeropuerto de Sevilla, donde el Juzgado de Instrucción número ocho indaga presuntos ataques y amenazas a conductores de vehículos de transporte concertado (VTC) y a taxistas para acaparar la parada de taxis de dicho espacio, ha sido objeto de daños diversos como el rajado de dos de sus neumáticos o el vertido de un líquido decapante sobre la carrocería, según han informado a Europa Press fuentes del caso.
Según tales fuentes, los hechos habrían ocurrido la noche del pasado viernes al sábado siguiente, cuando el vehículo auto taxi de este hombre estaba estacionado en plena vía pública de Gelves, el municipio donde reside.
Tras haber estacionado el vehículo el viernes y acudir el sábado por la mañana a usar el mismo, este taxista habría descubierto que durante la noche, alguien había "rajado" los neumáticos de las ruedas delanteras, vertido un líquido decapante por "todas" las partes de la carrocería y obstruido el tubo de escape con espuma de poliuretano, extremo que ha dejado inservible el coche hasta que el mismo sea reparado.
El afectado habría formulado ya la correspondiente denuncia, relatando que pese a desconocer la autoría de los hechos, como taxista presta servicios previamente concertados con clientes, en ocasiones con el aeropuerto de Sevilla como punto de destino, dando cuenta en ese sentido de que en dos ocasiones había sido "amenazado" por diferentes taxistas del aeropuerto para que dejase de realizar portes con relación al citado recinto.
ANTECEDENTES
Recientemente, por cierto, el coche de un taxista que trabaja realizando servicios concertados para agencias de viaje con relación al aeropuerto denunciaba ante la Policía Nacional que su vehículo había sido objeto de numerosos daños como la fractura de las lunas y el rajado de los neumáticos mientras estaba estacionado cerca de su domicilio. A lo largo de las semanas previas a dicha situación, otros vehículos de taxistas que también prestan servicios concertados en el aeropuerto, utilizando la parada específica para este tipo de portes, habrían sido también objeto de otros incidentes como el pinchado de los neumáticos o arañazos, mientras estos conductores estarían afrontando "amenazas e insultos" por parte de un grupo de taxistas.
Recordemos al respecto que fruto de unas pesquisas iniciales de la Brigada de Información de la Policía Nacional, que llegó a investigar al menos a 32 taxistas, el Juzgado de Instrucción número ocho tiene abiertas diligencias por supuestas amenazas y ataques de taxistas a conductores de vehículos de transporte concertado (VTC) y por presuntas situaciones de coacción y amenazas para acaparar la parada de taxis del aeropuerto de San Pablo.
LA SITUACIÓN DE SOLIDARIDAD HISPALENSE
En las segundas diligencias, en ese sentido, figuran como investigados los principales responsables de la asociación Solidaridad Hispalense del Taxi, con sede precisamente en el aeropuerto de Sevilla y cuyas instalaciones fueron objeto de un registro policial allá por junio de 2017, así como la propia asociación como persona jurídica.
Al respecto, los informes policiales derivados de dicho registro, recogidos por Europa Press, reflejan que los agentes habrían encontrado en la sede de Solidaridad Hispalense del Taxi documentación relativa a sanciones de la asociación a sus miembros, con prohibiciones temporales respecto al uso de la parada de taxis del aeropuerto o medidas punitivas por no participar en las movilizaciones convocadas por la entidad.
De estos extremos, a juicio de los agentes, se infiere "que la Asociación Solidaridad Hispalense del Taxi impone su propio calendario de días de descanso o bien se arroga la potestad sancionadora de la administración" en la parada de taxis del aeropuerto, sujeta a una tarifa única.
FOTOGRAFÍAS DE COCHES PATRULLA
Entre la documentación decomisada, además, figurarían "fotografías de coches patrulla de la Policía Local en la que sale la placa de matrícula y fotografías de policías locales, además de anotaciones de números de carné de policías locales que señalan como perseguidores de los taxistas de la asociación".
Igualmente, los agentes habrían encontrado, siempre según los atestados policiales, "fotografías de vehículos VTC estacionados" en un lugar donde "se produjeron daños grabados en las cámaras de video vigilancia los días 9, 21 y 25 de enero" de 2017, así como "fotografías de un conductor de Tussam", entre otros aspectos.
La defensa de los dirigentes de Solidaridad Hispalense del Taxi investigados en esta causa, de su lado, ve "novelescos" estos atestados policiales al considerar que se basan en meras "elucubraciones ayunas del más elemental soporte probatorio".