Un edificio con catorce viviendas en Torremolinos que llevaba ocupado más de una década y en el que había una pequeña plantación de marihuana, ha sido desalojado según ha relatado a EFE uno de los socios de la empresa que ha realizado la desocupación Exit Okupas, Alex Caro.

El bloque carecía de agua corriente y electricidad, algo que sus ocupantes habían solventado instalando generadores individuales y recurriendo a creativas alternativas, ha explicado Caro, lo que provocaba que cada cierto tiempo el inmueble se quedase sin luz y generaba malestar en el vecindario.

El edificio desalojado estaba habitado al completo, según fuente, y hasta en el cuarto del ascensor y en dos de los trasteros había gente viviendo.

Junto a la falta de servicios básicos y “unas condiciones de vida muy insalubres” hallaron espacios abarrotados de muebles, basura por doquier, orina, heces y malos olores cuando al fin pudieron entrar, han explicado.

El representante de la empresa de desocupación ha afirmado que el desalojo se ha realizado conforme a la ley, a pesar de que algunas personas, cuchillo en mano, se pusieron agresivas con ellos, y ha añadido que la Policía Nacional acudió durante el desalojo.

Caro ha subrayado que están acostumbrados a este tipo de situaciones en las que les amenazan con denunciarlos y ha señalado que lo tienen todo grabado y documentado para evitar cualquier tipo de complicación futura.

El edificio ocupado, denominado Brocante, ubicado en la calle Villa Flora de Torremolinos y construido hace unos diez años, carecía de cédula de habitabilidad por lo que en su momento no pudo ponerse a la venta y acabó siendo ocupado ilegalmente.