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Torremolinos

“Fusionamos nuestra cocina con los valores de la Selección Española”

Daniel García Peinado, chef malagueño, afincado en Torremolinos, es Chef Ejecutivo del Gourmet de la Roja y Capitán de la Selección Española de Cocina

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Dani García Peinado en las cocinas.

Foto de equipo en la Cala Resort.

  • El chef viaja a Rusia con la Selección Española de Cocina Profesional para ofrecer su gastronomía a la Selección Española de Fútbol en el Mundial
  • "No tenemos mejor o peor cocina que los vascos. Los malagueños somos diferentes y en esa diversidad encontramos la riqueza"

Su naturalidad es como el aceite de oliva: tras algo, aparentemente sencillo, se esconde una fábrica de buenas ideas que benefician a todo aquel que se rodea de él.

El chef Daniel García Peinado, residente en Torremolinos, abandera la lucha por el reconocimiento de las bondades del oro líquido. Cuarto puesto individual representando a España en el mundial de cocina de Praga Global Chefs Challenge, Premio Olivo Verdial de Málaga 2018 o representante español en el día de la Hispanidad para la embajada española de Washington, son algunos reconocimientos de este chef tan internacional.

¿Qué supone tu participación en el Mundial de Fútbol de Rusia como Chef ejecutivo del Gourmet La Roja?

–A través de la Selección Española de Cocina somos los cocineros oficiales de la Selección Española de Fútbol. Cocinamos para el presidente y futbolistas dentro de su concentración. Ellos tienen su propio cocinero y dietistas, sin embargo, cuando están lesionados, hay algún evento especial o tienen visita familiar, sí que se pueden pasar por nuestra zona para degustar lo que les preparamos. Buscamos fusionar nuestra gastronomía con los valores de la Selección de Fútbol.

¿Qué pasos previos diste antes de especializarte en el AOVE?

– Estuve un tiempo trabajando en un restaurante de tapas, en un hospital trabajando sobre dietas, ya que estudié nutrición y dietética y también estuve en el triple estrella Michelín de Martín Berasategui, Lasarte. La parte de nutrición y dietética me sirvió para conocer a José Antonio Amérigo, actual presidente de la Sociedad Andaluza Oleocanthal, que se dedicaba a buscar a cocineros por todos los hoteles. Acabó en el hotel Vincci, donde le preguntó a la directora si yo tenía conocimiento sobre nutrición y dietética para hacer una dieta específica con aceite de oliva. Empezamos a trabajar con reumatismo y con problemas en articulaciones. Dimos con un antiinflamatorio natural que estaba en el AOVE, el Oleocanthal. A raíz de ahí empecé a trabajar por el mundo con el aceite de oliva. Conocí también a Paco Lorenzo, médico, que me dio a conocer la parte que me faltaba: la cata con el mundo químico.

¿Crees que nos preocupamos más por el consumo del aceite de palma, que por el buen uso del aceite de oliva?

–Creo que a raíz de la legislación que cambió el consumo de este tipo de aceite en las cocinas, la gente se preocupa más por la parte de salud y por la grasa que utilizan. En España, como tenemos muy a mano el aceite de oliva, no le damos tanta importancia a este oro líquido. De hecho, hace poco leí que nuestro país es uno de los que más consume aceite de girasol. Creo que nos movemos más por la desidia. Sin embargo, en Estados Unidos, Japón, China y Australia están empezando a cultivar olivos para sustituir la soja y el aceite de palma.

Al llevar tu investigación fuera de España, ¿qué reacción has encontrado?

–Los americanos nos llevan años de ventaja. No por ser más listos que nosotros, si no que captan desde un primer momento lo que es bueno para ellos. Cuando hicimos la incursión en Estados Unidos, les demostramos científicamente que cocinar con virgen extra es más saludable. Ellos fueron capaces de captar la idea y sé que hay un aumento del consumo de este producto.

¿Qué le falta a la cocina malagueña para destacar por encima de otras más conocidas, como la vasca?

–Los malagueños siempre nos hemos diferenciado por el pescaíto frito. Sin embargo, hay que tener en cuenta que nosotros tenemos casi, casi lo mismo que tienen en el norte. Ellos tienen playa, montaña, zonas de interior... No somos mejores o peores, somos diferentes y en esa diversidad está la riqueza. Sin embargo, ellos siempre han salido defender lo suyo, tienen mayor nivel gastronómico por su cultura o clima. Ahora mismo estamos al mismo nivel, si no fíjate en todas las estrellas Michelín que están dando en Málaga.

¿Cuáles son tus siguientes pasos?

–Estamos formando muy buen equipo en la Cala Resort, en Mijas. Estoy muy contento por ayudarles a formarse en aceite de oliva virgen extra, que es algo muy necesario, y en cuestión de unos meses podremos ver un cambio en la carta con el AOVE como protagonista.

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