Según ha informado hoy el Instituto Armado en un comunicado, la marihuana estaba siendo cultivada en una vivienda deshabitada en la que se había instalado un invernadero y en cuyo interior se descubrieron 31 plantas y 310 gramos de cogollos de marihuana secos y envasados.
El invernadero, que ocupaba una habitación de la vivienda, estaba dotado de instalación de luz artificial, extractores de olores y ventiladores, explica el comunicado.
Según la Guardia Civil, el titular de la vivienda, padre de uno de los detenidos, ignoraba el uso que se estaba dando a la misma por parte de estos, cuyas identidades se corresponden con las iniciales M.V.L, y A.M.A.H.