La Familia Miró ha anunciado que este jueves en la Fundació Pilar i Joan Miró de Palma llevará a cabo un acto de renuncia pública a los derechos que corresponden a los herederos de Joan Miró por la explotación de la 'Marca España' creada por este artista con el objetivo de "lograr la estabilidad patrimonial" no solo de su fundación en Barcelona, sino también de la de Mallorca y la de Mont-roig del Camp.
En declaraciones a Europa Press, Joan Punyet Miró, nieto del artista Joan Miró, ha explicado que en 2008, "tras 25 años de la muerte" de su abuelo, los derechos derivados de la explotación de la 'Marca España', revertieron en sus herederos y que en ese momento, ellos pidieron al Gobierno "el compromiso permanente de protección del legado de Miró en España" para asegurar su "estabilidad financiera".
"La marca Miró para España es eterna y seguirá defendiéndose cuando nosotros estemos muertos", ha asegurado Punyet Miró, que también ha resaltado "el interés turístico" del diseño creado por su abuelo para fomentar España o Mallorca como destinos culturales.
Así, tal como pidió el artista cuando creó la marca, los herederos ahora renuncian a los derechos derivados de su uso para que el Gobierno, "en la medida de sus posibilidades", pueda proporcionar "fondos suficientes para lograr una estabilidad financiera y así poder realizar sus funciones culturales a lo largo del tiempo".
Según han resaltado desde la Familia Miró en una nota previa de este acto al que asistirá Punyet Miró en su representación, el Estado, "consciente de la importancia de la 'Marca España' y de la actividad cultural de las fundaciones, ha devenido en Patrono de las tres y se ha comprometido moralmente a su mantenimiento".
En dicho acto, Punyet Miró, en nombre de los sucesores de Joan Miró procederá a renunciar a dicha reversión, renuncia que "se ha estimado debe hacerse de forma pública" para que quede "constancia de los esfuerzos que el Estado y los sucesores de Joan Miró realizan para que las fundaciones sigan en activo en bien de la cultura".
