El máximo órgano electoral dictó el jueves cuatro instrucciones para aclarar la aplicación de la nueva normativa electoral aprobada en enero y que recoge la prohibición a los cargos públicos de cualquier Administración de celebrar inauguraciones desde que se convocan los comicios hasta su celebración.
La propuesta inicial que la Junta entregó a los partidos incluía un párrafo defendido por el PSOE y el PP en el que se señalaba que quedaban excluidas expresamente de la prohibición las "visitas" a obras por parte de representantes de las administraciones responsables como "actos de gestión ordinaria" de los gobiernos.
Este apartado fue muy criticado en el trámite de alegaciones que abrió la JEC por las fuerzas minoritarias, como IU y el BNG.
El texto final aprobado por la JEC y publicado hoy en el BOE no contiene alusión alguna a las visitas a obras públicas y se limita a recordar la prohibición de las inauguraciones, que está vigente desde mañana, fecha de convocatoria de los comicios del 22 de mayo.
Ya piensen que están prohibidas las visitas o que, por el contrario, se permiten, los partidos coinciden en que esta cuestión no ha quedado debidamente aclarada y anticipan que la Junta deberá pronunciarse pronto sobre ella.
El PP considera que, a la vista del texto de la JEC, no hay prohibición de visitas porque de ser así habría constado explícitamente, han explicado a Efe fuentes del grupo popular.
La reforma electoral aprobada en enero no contenía tal restricción, argumentan las fuentes, porque así lo defendieron populares y socialistas, al entender que las visitas deben entenderse como parte de gestión de una Administración, siempre que no se aprovechen para destacar logros o hacer publicidad de éstos.
Como en el "espíritu" de la reforma estaba reducir costes electorales y de los poderes públicos, se prohibían las inauguraciones, pero para el PP este veto no debe de confundirse con las visitas, que pueden ser incluso "necesarias" para supervisar o resolver problemas mientras la obra se acomete, aseguran las fuentes.
Sin embargo, CiU tiene claro que ya no se pueden hacer visitas porque la nueva ley prohíbe "cualquier tipo de actividad", afirma el diputado Jordi Xuclá, que fue ponente de la reforma y que se muestra sorprendido porque los mismos que impulsaron la reducción de gastos intenten una "contrarreforma" endosando el asunto a la JEC.
Xuclá advierte de que la nueva Ley Electoral debe interpretarse también a la luz de lo que estableció la Ley de Publicidad Institucional de 1985, en contra del "autobombo", la cual, explica, se incumple "reiteradamente" por parte de las Administraciones.
Otro partido nacionalista, el BNG, está convencido de que la JEC le ha dado la razón y de que las visitas han quedado tan prohibidas como las inauguraciones.
Los nacionalistas gallegos celebran que este órgano haya hecho caso a una de sus alegaciones y subrayan que muchos de los supuestos que "con enorme demagogia" defendían el PSOE y el PP pretendían "eliminar" el contenido y el espíritu de la reforma electoral.
Izquierda Unida también entiende que la supresión del texto final del párrafo en el que se admitían las visitas supone de hecho su prohibición.
Esta formación que ya ha remitido una circular con los acuerdos de la Junta a todas sus organizaciones para que cumplan con lo establecido en las cuatro instrucciones.
Todos los partidos consultados creen que la JEC debería pronunciarse con más claridad sobre esta cuestión para evitar un aluvión de denuncias o quejas en precampaña, algo que podría hacer si hay candidaturas que recurren alguna de estas polémicas visitas.